¿Le regalo a mi hijo un celular de gama alta?
Si el trabajo no te permite estar cerca de tus hijos, un celular con todas las aplicaciones no sería una buena opción
El transcurso de los años no sólo permite que se lancen al mercado nuevos modelos de celulares sino, también, que su uso se vuelva cada vez más horizontal: la posesión de un dispositivo ya no está en relación a la edad de quien lo utilice. Es posible ver, con más frecuencia, que niños y adolescentes ya cuenten con un celular que les permita ingresar a un mundo donde los límites solo son puestos por la cantidad de datos del plan al que están suscritos.
¿Un buen regalo de cumpleaños?
En un artículo publicado recientemente en ABC, señalamos que, de acuerdo a Benjamín Ballesteros, director de programas de la Fundación ANAR, la edad recomendable para que una persona utilice un dispositivo móvil es de 15 años. No obstante, antes de cruzar esa barrera, es importante resaltar que los chicos sí podrían utilizar teléfonos: según recomendó Luana Sprinckmoller, fundadora de ConociMentor, empresa que brinda capacitaciones en línea, estos podrían ser de gama baja. Con ello, se hace alusión a aquellos teléfonos que no cuentan con las aplicaciones de redes sociales como Facebook e Instagram. Al parecer, regalar un aparato tecnológico de alta gama, que incluya esos aplicativos, podría dejar de ser un buen regalo si consideramos que, a través del espacio social virtual, los chicos pueden interactuar en un mundo que tiene sus propias reglas y amenazas.
Es preciso señalar en este punto que, si bien las redes sociales nos permiten estar en contacto con familia y amigos, pueden convertirse en un canal de riesgos si no se administra con cuidado y teniendo en cuenta los límites de privacidad que debemos establecer en nuestros perfiles. Entonces, si los padres de familia no controlan y supervisan el tiempo que sus hijos pasan en las redes sociales, ya sea por razones de trabajo u otras, lo que se sugiere es comprar un celular que solo se utilice para llamadas y mensajes de texto hasta dicha edad. Ahora, los padres pueden convertir a esos dispositivos en aliados que les permitan comunicarse con sus hijos a través de los servicios básicos: no es necesario tener Facebook Messenger o WhatsApp para enviar un mensaje y preguntar al pequeño si llego bien a casa o si necesita algo.
Como parte de los aparatos que sí podrían ser utilizados, la experta, Luana dijo también que, otra de las opciones a considerar serían las tablets con parent control, las cuales permiten que los padres limiten y controlen la navegación de sus hijos a través de distintas páginas en la web. Asimismo, según indicó, este dispositivo sería el más recomendable ya que los niños utilizan los aparatos tecnológicos para jugar o ingresar a la aplicación de Netflix, la cual permite reproducir distintas películas y series.
Cambiando de hábitos
Desde otro ángulo, se debe tener en cuenta también que, como señalamos anteriormente, el horario laboral quizás no permita compartir ese tiempo necesario para orientar la atención de los niños hacia otras actividades. Por ello, los fines de semana pueden ser espacios que tanto niños y adultos pueden compartir durante la semana. Sprinckmoller recomendó a los chicos manejar bicicleta al aire libre, así como también caminar. Si los niños o adolescentes ya acceden a redes sociales, lo que sí se debe priorizar es el control de las personas que envían solicitud de amistad y sobre aquellas que los niños se disponen a aceptar.
Finalmente, y en línea con el avance tecnológico que cada día sorprende a más de uno, la especialista sugirió que los niños se inscriban en cursos donde puedan desarrollar sus habilidades para programar y motivar su creatividad con el uso de la tecnología.
Recordemos que tan importante como ser consumidores de aplicaciones es ser conocedores de qué plataformas usamos para estar conectados.